Un vecino de Cantavieja fallece al precipitarse por un peñasco
Un vecino de Cantavieja de 68 años que respondía a las iniciales A. C. ha fallecido en la tarde de este viernes al precipitarse accidentalmente por el cortado rocoso que bordea parte del monumental casco urbano. La caída, de unos 30 metros de desnivel, se produjo cuando el hombre paseaba acompañado de varios perros por un lugar que frecuentaba al estar situado cerca de su vivienda habitual.
El trágico accidente, del que no hubo testigos, se produjo en torno a las 14.30, pero no fue detectado hasta un tiempo más tarde cuando un hijo de la víctima, inquieto porque no regresaba a casa, se dirigió al lugar que frecuentaba su padre y descubrió lo ocurrido.Desde la Guardia Civil, informaron de que el motivo de la caída pudo ser un resbalón o que el vecino se enredara con los perros con los que paseaba y perdiera el equilibrio. Fue un episodio de "mala suerte", añadió la misma fuente.
El alcalde de Cantavieja, Ricardo Altabas, señaló que A. C. conocía perfectamente el lugar en el que se produjo la fatal caída porque "pasaba todos los días por allí". Se trata del borde rocoso sobre el que se asienta el barrio de Loreto y que forma una estampa que constituye una seña de identidad de la monumental localidad.
Hasta el lugar del siniestro se desplazaron efectivos de la Guardia Civil y una dotación de bomberos para rescatar el cadáver, que se encontraba en un lugar de difícil acceso. Una dotación de tres operarios a bordo de un vehículo se trasladó desde el parque de extinción de incendios de Teruel capital para recuperar el cuerpo sin vida del vecino.
Inicialmente, varios voluntarios de Cantavieja faciltaron el acceso de personal sanitario hasta el punto donde se produjo la caída para tratar de auxiliar al accidentado, aunque cuando el médico llegó hasta el lugar solo pudo certificar la muerte del paseante.
Altabás señaló que el pie del acantilado donde fue a caer A. C. es un espacio de mala accesibilidad por la complicada orografia y por los zarzales que crecen en el entorno. El alcalde señaló que al trágico suceso conmocionó a la población.
Hasta el lugar del siniestro se desplazaron efectivos de la Guardia Civil y una dotación de bomberos para rescatar el cadáver, que se encontraba en un lugar de difícil acceso. Una dotación de tres operarios a bordo de un vehículo se trasladó desde el parque de extinción de incendios de Teruel capital para recuperar el cuerpo sin vida del vecino.
Inicialmente, varios voluntarios de Cantavieja faciltaron el acceso de personal sanitario hasta el punto donde se produjo la caída para tratar de auxiliar al accidentado, aunque cuando el médico llegó hasta el lugar solo pudo certificar la muerte del paseante.
Altabás señaló que el pie del acantilado donde fue a caer A. C. es un espacio de mala accesibilidad por la complicada orografia y por los zarzales que crecen en el entorno. El alcalde señaló que al trágico suceso conmocionó a la población.
No hay comentarios:
Publicar un comentario